Dureza del agua y como afecta los lavavajillas industriales
5 mayo 2015 -
Qué es la dureza del agua y las soluciones
para bajar su nivel
El usuario común no suele distinguir entre las aguas pluviales y las subterráneas (recordemos que ambas fluyen hacia los embalses y luego hacia nuestros grifos).
El agua de lluvia es un agua muy blanda porque sólo contiene trazas de sales en solución.
Las aguas subterráneas, en cambio, pueden tener diversas durezas en función de las capas de suelo que atraviesan, la solubilidad de las rocas y las sales.
La diferencia parece insignificante, pero en realidad es considerable; de hecho, el agua dura no causa más que dificultades, especialmente cuando se trata de lavavajillas industriales.
Hay dos tipos de dureza del agua utilizada en los lavavajillas industriales:
1. Dureza temporal (también conocida como dureza de carbonato)
2. Dureza permanente (o dureza no carbonatada)
La dureza del agua se mide en grados (los grados franceses y alemanes son los más utilizados tradicionalmente).
Un grado francés corresponde al contenido de sales endurecedoras (calcio, magnesio, etc.) expresado en 10 mg/l de carbonato de calcio.
En general, se utiliza la siguiente clasificación del agua en relación con su dureza:
Agua blanda 10° F
Agua de dureza intermedia 10-20° F
Agua dura 20-30° F
Agua muy dura por encima de 30° F
El inconveniente causado por la dureza es el de la precipitación, es decir, la transformación de bicarbonatos (solubles) en carbonatos (insolubles) La precipitación se hace visible al tomar la forma de un depósito (como el que se forma dentro de una olla en la que se ha hervido el agua).
La dureza temporal es más problemática que la permanente, ya que una de las principales causas de su precipitación es el calentamiento, mientras que la dureza permanente no provoca la precipitación tras el calentamiento (ebullición) y, por tanto, las sales que contiene permanecen en solución.
La importancia de la baja dureza del agua es más evidente en la fase de aclarado de los lavavajillas industriales. Cada gota de agua, una vez seca sobre una superficie como un plato o un cristal, deja allí un depósito de dureza en forma de sales insolubles de calcio o magnesio.
En cada ciclo de lavado se forma una nueva película de sales que cubre la vajilla y los vasos de una pátina mineral o de diversas manchas.
Ventajas para el lavavajillas al reducir
la dureza del agua
Es muy importante conectar el lavavajillas industrial directamente al agua caliente (todos los modelos de lavavajillas y lavavasos profesionales de Sistema Project Italia ya están adaptados a este tipo de instalación).
Esto permite un considerable ahorro de energía, debido a que el agua que entra en el lavavajillas ya está a una determinada temperatura, y además se reduce considerablemente la acumulación de cal en la resistencia del interior de la caldera y de la cuba de su lavavajillas industrial.
La combinación de un buen detergente y un buen aditivo de aclarado reduce significativamente
los problemas causados por la dureza del agua, sin embargo, en algunos casos y a partir de un determinado nivel de dureza, la única solución satisfactoria es el uso de un ablandador de agua.
Por otro lado, el uso de un sistema de ósmosis inversa es necesario si el agua que utiliza el lavavajillas o el lavavasos para lavar y enjuagar la vajilla debe ser purificada de cualquier residuo químico, bacteriológico, orgánico o microorganismos.
Póngase en contacto con nosotros para obtener más información sobre nuestros lavavajillas, lavavasos, lavavajillas industriales y soluciones de ablandamiento del agua.
Sistema Project Italia Staff